Fue en Honduras al 6100. Los delincuentes estaban armados y permanecen prófugos.Vecinos denunciaron zona liberada.
Dos delincuentes armados asaltaron el miércoles la confitería Decata, ubicada en Honduras al 6100 en pleno corazón del barrio porteño de Palermo, cuando abría sus puertas. Se llevaron el dinero de los clientes y de la caja registradora.Los ladrones actuaron en menos de cinco minutos y a cara descubierta. Utilizaron pistolas de gran porte para intimidar a los comensales y apoderarse de todas sus pertenencias, además de llevarse la recaudación que estaba dentro de la caja registradora.
El propietario del comercio, identificado como Pablo Joillione,les contó a los efectivos que también se llevaron celulares, anteojos, billeteras y anteojos.“¿Vos estás loca, querés morir?”, le gritaron a una mujer por negarse a entregar su cartera. Luego, le dieron un culatazo.Según el testimonio del dueño del local, los delincuentes estacionaron en la puerta del local y escaparon en una moto antes de que llegaran los efectivos de Policía de la Ciudad de Buenos Aires. Por su parte, testigos presenciales aportaron el dato de que los ladrones tendrían entre 20 y 25 años, eran agresivos y violentos. Además, denunciaron que la zona estaba liberada.
Las cámaras de seguridad del comercio registraron el violento episodio. Fuentes policiales informaron que los delincuentes estacionaron una moto negra en la puerta de la confitería y luego, se dieron a la fuga en el mismo vehículo por Dorrego rumbo a la Avenida Córdoba. En el caso, intervino la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N 50.Hace quince días, otros dos jóvenes también asaltaron Decata, pero fue sin agresiones en aquella oportunidad.
El 3 de noviembre, unos 20 clientes de un restaurant de comida india del barrio porteño de Palermo pasaron una noche de terror el viernes. Fueron 15 minutos de agonía y tensión. Mientras estaban cenando, tres delincuentes entraron armados al lugar, golpearon a una clienta y se llevaron las pertenencias de todos los comensales, además de la recaudación del local.
Todo empezó a las 23.45 en el local Taj Mahal, ubicado en Nicaragua al 4345. Está a pasos de la avenida Scalabrini Ortiz y a una cuadra y media de Plaza Armenia, una zona muy transitada, en cuyo alrededor en la última década se consolidó un polo gastronómico.Los ladrones fueron directo a la caja registradora para apoderarse de 20 mil pesos en efectivo. También se llevaron 5 celulares, joyas, relojes y 28 mil pesos de los clientes.
A una comensal de 60 años le pegaron un culatazo en la cabeza para arrebatarle la cartera. Aunque quedó fuera de peligro, tuvo que ser asistida por personal del SAME. No fue trasladada a un hospital, pero le diagnosticaron “traumatismo de cráneo”. Otra clienta recibió dos trompadas.Después de gritar “Todos quietos, no se mueva nadie”, los tres asaltantes escaparon a pie con todas las pertenencias. Fuentes de la investigación sospechan que había un cuarto delincuente esperándolos afueraa bordo de un auto, lo cual facilitó la fuga de los victimarios.
Al poco tiempo, arribó Policía de la Ciudad para labrar las actuaciones del hecho. Los efectivos se entrevistaron con la encargada del lugar quien aportó información a la causa. Además, se secuestraron dos botellas de vino, que fueron manipuladas por los ladrones, para realizar pericias; en tanto se realizan relevamientos de cámaras y testigos para identificar a los delincuentes.El suceso quedó caratulado como “robo a mano armada y lesiones”. Interviene la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nro 41, a cargo de la Dra Russi.
A la mañana siguiente, Melik, el cocinero del restaurant, les contó a los medios de comunicación que los delincuentes forcejearon violentamente con los clientes y que se vivieron momentos de mucho miedo por lo que pudiera pasar.
Por su parte, el empleado de la bicicletería de enfrente contó que días atrás también fue víctima de un robo.