Nada se sabía desde el viernes sobre el paradero de Lucio Correa, un adolescente de 17 años que había asistido a una fiesta electrónica en el barrio porteño de Palermo y había desaparecido. Tras más de 60 horas de una búsqueda desesperada, su cuerpo fue finalmente hallado en la morgue. El joven fue atropellado sobre la avenida Lugones.
El subjefe de la policía Metropolitana, Ricardo Pedace, confirmó a LA NACION: “El joven se encontraba en la morgue judicial a raíz de un accidente de tránsito del sábado, con intervención de la Policía Metropolitana, y estaba a la espera de su identificación. En la Policía de la Provincia se había radicado la denuncia”. La organización Personas Perdidas esperaba recibir datos para dar con el paradero del joven.
Pedace dijo que una hermana de Lucio y su cuñado fueron los que identificaron el cuerpo del joven. “El cuerpo quedó muy golpeado por el accidente”, informó el subjefe de la Policía, a cargo del caso, que ya está siendo investigado por la Justicia.
Lucio, quien había concurrido a una fiesta en los bosques de Palermo, en la intersección de Figueroa Alcorta y Dorrego, fue atropellado por un camión en la avenida Lugones, cuando el joven quiso cruzar en un lugar donde no estaba permitido el cruce. Se investigan las circunstancias del hecho. El camionero declaró que el joven estaba “vagando” por el lugar y cruzó por un lugar indebido.
El uniformado agregó que se está haciendo la autopsia y los estudios toxicológicos. “Si se llega a detectar algo de alcohol o droga en la sangre eso será comunicado al juez de la causa”, concluyó